La Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia presidida por el juez César San Martín Castro halló culpable por unanimidad luego de 16 meses de proceso al ex presidente Alberto Fujimori en los casos de las masacres de la universidad La Cantuta y Barrios Altos, y por los secuestros del empresario Samuel Dyer y el periodista Gustavo Gorriti.
“Este tribunal declara que los cuatro cargos objeto de imputación se encuentran probados más allá de toda duda razonable. La sentencia que se emite es condenatoria”, dijo San Martín.
La condena es de 25 años de prisión y del pago de 20 mil dólares a los deudos de las víctimas. Fujimori, que cumple 71 años el próximo 28 de julio, recibió su condena tras 484 días de iniciado el juicio el 10 de diciembre de 2007. Alberto Fujimori Fujimori saldrá en libertad el 10 de febrero de 2032 cuando el ex mandatario tenga 95 años.
Vestido de terno y corbata negra, y bebiendo agua mineral en varios momentos, Fujimori escuchó en un impertubable silencio la sentencia mientras escribía sin detenerse en una libreta sin mirar en ningún momento al tribunal.
Su hijos Keiko y Kenji Fujimori, escucharon la sentencia con evidente molestia, mientras que la madre de uno de los estudiantes universitarios de La Cantuta asesinado por el grupo Colina lloraba.
El juez San Martín dijo que por la complejidad del caso y por la gravedad de las acusaciones un equipo formado por más de 20 personas trabajó junto a los otros dos magistrados: Hugo Príncipe Trujillo y Víctor Prado Saldarriaga.
San Martín indicó que la sentencia estaba dividida en cuatro partes, constaba de 711 folios, 8.390 parágrafos, 1.258 notas a pie de página y el texto estaba escrito en letras Century de tamaño 11.
Este es un fallo histórico, ya que es la primera vez que un ex mandatario peruano y latinoamericano, elegido bajo comicios democráticos, es declarado culpable bajo la justicia de su país por violaciones a los derechos humanos.
La directora de Amnistía Internacional (AI) en Perú, Silvia Loli Espinoza, consideró que el proceso al ex mandatario (1990-2000), por abusos contra derechos humanos, ha sido un ejemplo de innegable objetividad y pulcritud.
Luego de leida la sentencia, Keiko Fujimori afirmó que es indignante la resolución del Tribunal Especial que dijo estuvo cargado de odio y venganza adicionalmente anunció marchas «pacíficas» para «defender» a Alberto Fujimori.
A nombre personal, debo decir ante todo que no soy fujimorista, jamás votaría por Keiko, y el segundo gobierno de Fujimori me pareció de una corrupción nauseabunda. Estuve en marchas de protesta contra su gobierno pero esta condena me parece una exageración. Lamentablemente en toda guerra son inevitables los muertos inocentes. Y es sabido que algunos de los muertos en los hechos de La Cantuta y Barrios Altos eran miembros o estaban cercanos a Sendero Luminoso, hecho que tratan de negar sus familiares y las ONG’s. No soy un creyente a ciegas en los DDHH, creo en la pena de muerte y creo que hay gente que se la merece. Es verdad de que el Estado no debe rebajarse a combatir a un enemigo con una guerra sucia de esa magnitud, pero se debe evaluar el contexto en el que se hizo: un enfrentamiento contra un enemigo que desangraba al país. Talvez se equivocaron todos los responsables de esta matanza, talvez Fujimori se excedió en su política, pero no se lo puede tratar como un mafioso que mandó a matar a estudiantes y a miembros de una familia sólo porque tenía sed de sangre.
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